Insuficiencia de Primas

Actuarios y  Auditores

Una de las características más importantes del negocio del seguro es la inversión en el proceso de las primas pagadas por los asegurados con los que además de solventar los gastos de gestión se atienden los gastos derivados del pago de indemnizaciones por siniestros.

La prima es la principal fuente de ingresos estable destinada a financiar  los gastos de la actividad por tanto debe ser suficiente en todos sus componentes para garantizar la continuidad del mercado. No obstante la continuidad de este no se trata únicamente de una insuficiencia de primas  ya que puede darse el caso donde un defecto de uno de sus componentes pueda verse compensando con un exceso de otro, sin embargo igual se produce una distorsión en la situación patrimonial al cierre de un ejercicio.

Técnicamente la prima es el importe pagado por el asegurado o tomador a cambio de la cobertura de riesgo ofrecida por el asegurador. De esta forma el asegurador acepta la obligación que generalmente se materializa en una indemnización cuyo fin es resarcir al asegurado en caso de ocurrencia del siniestro amparado por póliza.

La descomposición de la prima para los actuarios no es tan simple como lo antes expuesto dado que varios factores pueden acarrear una insuficiencia de prima en los seguros. Para estos profesionales la composición viene dada por:

Prima de riesgo + Recargo para gastos de administración = Prima de Inventario +  Recargo de Seguridad + Recargo para compensar gastos de adquisición + Recargo de gastos para compensar gastos de mantenimiento + Recargo para posible margen de beneficio = PRIMA DE TARIFA + Recargo externo + Tasas Impuestos = PRIMA.

Las formulas empleadas para el cálculo de la prima de tarifa se basan en análisis estadísticos y en presupuestos de la entidad aseguradora, empleando además datos propios generales del mercado lo que puede ocasionar que por las características de la cartera o por la propia estructura de la compañía difieran de las bases de utilizadas en las formulas y se produzcan desviaciones que se manifestaran en el resultado técnico a presentar.

Una insuficiencia de prima existe cuando el valor actual de los costes futuros es superior a los ingresos, esta insuficiencia a su vez tiene un efecto patrimonial en las cuentas anuales de la aseguradora cuando se produzca en cualquiera de los componentes que constituyen la base del cálculo de la provisión para riesgos en curso.

Un defecto en la prima de tarifa supone un resultado técnico negativo que incidirá en el ejercicio que comience a tener vigencia la póliza como en el de expiración del contrato. Este defecto deberá ser contemplado en el cálculo de la provisión para que se cumpla el principio contable de “prudencia valorativa”, ya que al conocerse una perdida que va a producirse debe ser reconocida de forma inmediata en las cuentas anuales.

Generalmente las compañías al preparar sus cuentas anuales evalúan y corrigen las distorsiones patrimoniales significativas que pudieran resultar de:

1.- Una prima de riesgo inferior a la siniestralidad real, lo que origina una sobrevaloración de los ingresos del ejercicio.

2.-Si los gastos de gestión interna son superiores a los contemplados por los técnicos.

¿Pero qué ocurre cuando las distorsiones no son corregidas?

El mercado en su conjunto comienza a generar una burbuja financiera que su dimensión dependerá, entre otras cosas, del azar y la especulación.

¿Cuál es la consecuencia inmediata de esta maniobra?

El vaciamiento y devastación del mercado local.

¿Quién asume la responsabilidad de una contabilidad creativa?

El organismo encargado de controlar y velar por la confiabilidad del mercado que a través de sus auditores debería ejercer el poder control.

¿Quién asume las consecuencias?

De manera inmediata el asegurado. A largo plazo: todos y  todas.

MA!@madarok

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